22 de enero de 2020
Sanar en sábado para Jesús, equivale a salvación para todo hombre y continuar por esa vía es cumplir la misión que Dios le confió (cfr. Jn. 5, 17-19). La ira y la tristeza del corazón de Cristo, es por la cerrazón de sus interlocutores, su palabra salvadora produce en ellos que se sumerjan en las tinieblas de sus siniestros pensamientos que asesinan al enviado de Dios. Esa actitud del corazón de Cristo, revela su misión salvadora y toda su persona. Su tarea es anunciar la vida, comunicarla a quien cree, salva de la muerte, al que acepta su mensaje. La Iglesia es hoy la que defiende la vida desde su concepción hasta su deceso natural, pues cree que la vida es don de Dios y propone el camino del Evangelio como encuentro con la salvación que Jesús nos trajo a todos los hombres.
Teresa de Jesús, vivió y propone el camino de la oración como la mejor arma para abrir, con la gracia del Espíritu Santo, el corazón endurecido por el pecado. Teresa lo vivió y lo propone como camino de entrega a Dios.
Teresa de Jesús, vivió y propone el camino de la oración como la mejor arma para abrir, con la gracia del Espíritu Santo, el corazón endurecido por el pecado. Teresa lo vivió y lo propone como camino de entrega a Dios.
Julián Escobar.
Comentarios