4 de mayo de 2020

Lunes IV de Pascua 
Evangelio (Jn 10,11-18
Jesús habló así: «Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas. 

Comentando santo Tomás de Aquino esta afirmación, escribe que «es evidente que el título de “pastor” conviene a Cristo, ya que de la misma manera que un pastor conduce el rebaño al pasto, así también Cristo restaura a los fieles con un alimento espiritual: su propio cuerpo y su propia sangre».

San Agustín hablaba frecuentemente de esta exigente responsabilidad del pastor: «Este honor de pastor me tiene preocupado (...), pero allá donde me aterra el hecho de que soy para vosotros, me consuela el hecho de que estoy entre vosotros (...). Soy obispo para vosotros, soy cristiano con vosotros».

Hasta el monstruo de la Revolución francesa, CAMILLE DESMOULINS, escribió a su esposa estas palabras antes de ser guillotinado: “No te preocupes, creo que hay Dios... Lucila, nos veremos.”.

Cuando no se cree en Dios se cree en cualquier cosa. ¿Cree usted en Dios y se deja guiar por Cristo?
Julián Escobar.


| Lecturas del Día (+Leer). | Evangelio y Meditación (+Leer) |
| Santo del día (+Leer) | Laudes (+Leer) | Vísperas (+Leer) |

Comentarios

Entradas populares de este blog

30 de Octubre de 2018. Martes ¡No somos “superhombres”!

17 de junio de 2024

30 de agosto de 2024