7 de diciembre de 2020
Felices los pobres los que nada tienen por no estar apegados a ningún bien de la tierra.
Por estar dispuestos a dejarlo todo en nombre del Padre.
Los que poseen el secreto del riesgo y esperan contra toda esperanza.
En los que así viven ya se está realizando el Reino de Dios.
Felices los mansos los no-violentos los que saben admitir los criterios de los demás los que no se cansan y permanecen firmes en la lucha aceptándose como son. Los que así actúan ya tienen los bienes de la tierra.
Felices los que lloran los que se arrepienten de sus pecados cometidos y buscan el perdón los que desean compartir con los demás la alegría de la reconciliación.
Los que así sufren siempre tendrán el consuelo de Dios.
Felices los que tienen hambre y sed de justicia los que no desfallecen en la búsqueda y realización de la paz y la justicia de Dios. Sabiendo que no todo depende de ellos... esperan activamente. A éstos, Él les saciará en esta búsqueda.
- ¿Ves lo bueno de los demás?
- ¿Valoras lo bueno que hay en ti?
Comentarios