27 de marzo de 2024
Un domingo, mientras asistimos a la Eucaristía, se presenta Jesús, y ante el altar, de pie, con voz amable, nos dice: “Como no sois esclavos sino hijos, yo vuestro Salvador, os voy a limpiar de cualquier inmundicia”.
Uno a uno va diciendo nuestros nombres. Nos invita a sentarnos alrededor del altar. Entonces toma una jofaina con agua y nos va lavando los pies, nos los seca con su manto y nos los besa. Y encima, mirándonos a los ojos nos dice: “Haz con los demás lo que Yo he hecho contigo”.
¡Dios besando los pies a sus criaturas! Sólo los locos de amor, saben y entienden este gesto.
- ¿Hay amor donde no hay obras de servicio?
- ¿Entiende usted que amar es servir?
Julián Escobar.
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