19 de junio de 2020
- ¿Qué íntimo motivo te impulsa a mentir?
“¡Buenos días, Señor!”. Sí, soy Pilar (los idiotas me llaman la avispa). Bueno, he venido a pedirte perdón porque de vez en cuando, bueno, pues miento. ¡Mentiras sin importancia, pero miento! ¿Por qué miento? Quizás porque deseo que tengo uso de razón lo he hecho y ha ido aumentando con la vida creándome desconciertos y vicios contraídos. Recuerdo que en el Instituto me gustó un chico que salía con mi amiga Zita (Jacinta), así que le dije que el chico era gay a ver si luego me lo ligaba yo. Fuera de que mi amiga lloró tres días, no ocurrió nada. Otra mentira fue, ésta es graciosa, di una fiesta en casa, todas las bebidas eran sin alcohol y yo quería enrollarme con un profesor que estaba como el queso añejo. ¿Qué podía hacer? Pues le mentí diciéndole que había salido una bebida nueva. Lo que hice fue darle refresco de naranja con colonia. ¡Sí! ¡Colonia de dos euros un litro! Pues aunque no lo creas se emborrachó, y soltaba unos eructos super-perfumados. ¿Verdad que son mentiras piadosas?”
Julián Escobar.
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